Razas de la Alianza Descripción Imagen
Humanos Recientes descubrimientos han demostrado que los humanos descienden de los bárbaros vrykul, guerreros semigigantes que viven en Rasganorte. Los primeros humanos fueron esencialmente un pueblo segregado y tribal durante varios miles de años, hasta que la fuerza creciente del Imperio trol los obligó a unificarse. Así fue como se formó la nación de Arathor, junto con su capital, la ciudad estado de Strom.
Enanos Los audaces y valientes enanos son una antigua raza descendiente de los seres terráneos de piedra viviente creados por los titanes cuando el mundo era joven. A causa de una extraña enfermedad conocida como «la maldición de la carne», los progenitores terráneos de los enanos sufrieron una transformación que convirtió su tez pétrea en piel carnosa. Estas criaturas de carne y hueso se autodenominaron «enanos», y esculpieron la grandiosa ciudad de Forjaz en los picos nevados de Khaz Modan.
Elfos de la Noche Los ancestrales y recluidos elfos de la noche han desempeñado un papel fundamental en la forja del destino de Azeroth. Los elfos de la noche actuales todavía recuerdan la Guerra de los Ancestros de hace más de 10 000 años, cuando frustraron la primera invasión de Azeroth a manos de la Legión Ardiente. Siglos después, cuando los remanentes de la Legión se unieron a los viles sátiros, los elfos de la noche volvieron a hacer frente a la amenaza y terminaron venciendo a las fuerzas dispuestas a sembrar el caos en su mundo.
Gnomos Los inteligentes, valientes y a menudo excéntricos gnomos representan una paradoja única entre las razas civilizadas de Azeroth. Esta raza de brillantes inventores y de una alegría incontenible ha sufrido traiciones, segregaciones y casi el genocidio. Su extraordinario optimismo ante tales calamidades simboliza el espíritu verdaderamente resuelto de los gnomos.
Draeneis Mucho antes de que el titán caído Sargeras desatara la Legión sobre Azeroth, conquistó el mundo de Argus junto con sus moradores: los eredar. Convencido de que esta superdotada raza jugaría un papel fundamental en su afán de destruir la creación, Sargeras contactó con los líderes de los eredar —Kil'jaeden, Archimonde y Velen— y les ofreció poder y conocimiento a cambio de su lealtad.
Huarguen Tras la formidable Muralla de Cringrís, una terrible maldición se extendió por la aislada nación humana de Gilneas y transformó a muchos de sus valientes ciudadanos en espeluznantes bestias lobunas conocidas como «huargen». Los eruditos humanos debatieron ampliamente el origen de la maldición, hasta que se descubrió que los primeros huargen no eran pesadillas de otra dimensión, tal y como se creía, sino elfos de la noche druidas malditos.
Pandaren Envueltos en mitos y leyendas, los enigmáticos y peculiares pandaren han sido desde hace eones un misterio para las demás razas de Azeroth. La noble historia del pueblo pandaren se remonta miles de años atrás, mucho antes de los imperios del hombre e incluso del cataclismo del mundo.
Razas de la Horda Descripción Imagen
Orcos A diferencia de las demás razas de la Horda, los orcos no son nativos de Azeroth. En sus orígenes, vivían como clanes chamánicos en el exuberante mundo de Draenor. Dejaron a un lado su pacífica cultura cuando Kil'jaeden, un señor demoníaco de la Legión Ardiente, los corrompió y los usó para vengarse de los draenei, exiliados del mundo natal de Kil'jaeden.
No-muertos La muerte no supuso el descanso eterno que esperaba la multitud de humanos asesinados durante la campaña del Rey Exánime para erradicar toda vida de Lordaeron. En lugar de morir, los caídos del reino fueron resucitados como esbirros no-muertos de la Plaga y se vieron obligados a librar una profana guerra contra todo aquello y aquellos que una vez amaron.
Taurens Los pacíficos tauren, conocidos en su idioma como los shu'halo, son antiguos moradores de Kalimdor que luchan por preservar el equilibrio de la naturaleza a petición de su diosa, la Madre Tierra. Hasta hace poco, los tauren vivían como nómadas diseminados por los Baldíos y cazaban a los grandes kodos de la árida región.
Trols La mala fama de los salvajes trols de Azeroth se debe a su crueldad, su oscuro misticismo y su feroz odio por las demás razas, pero hay una excepción: la tribu Lanza Negra y su astuto líder, Vol'jin. Esta orgullosa tribu, cuya historia está marcada por la sumisión y el exilio, se halló al borde de la extinción cuando, a causa de una violenta tormenta, el Jefe de Guerra Thrall y sus poderosas tropas de la Horda acabaron en la remota isla —hogar de los trols— de los Mares del Sur.
Elfos de sangre Durante casi 7 mil años, la sociedad de los elfos nobles giraba en torno a la sagrada Fuente del Sol, un manantial que se creó usando un vial de energía arcana pura del primer Pozo de la Eternidad. Alimentado y fortalecido por las potentes energías de la Fuente del Sol, el encantado mundo de los elfos nobles, Quel’Thalas, prosperaba entre los verdes bosques al norte de Lordaeron.
Goblins En sus orígenes, los goblins eran esclavos de los trols de la selva de la Isla de Kezan, quienes los obligaban a explotar las minas de kaja'mita en las entrañas volcánicas del Monte Kajaro. Los trols usaban este potente mineral para sus rituales vudús, pero este produjo un efecto inesperado en los esclavos que estaban en contacto constante con él: la kaja'mita imbuyó de ingenio e inteligencia a la raza goblin.
Pandaren Envueltos en mitos y leyendas, los enigmáticos y peculiares pandaren han sido desde hace eones un misterio para las demás razas de Azeroth. La noble historia del pueblo pandaren se remonta miles de años atrás, mucho antes de los imperios del hombre e incluso del cataclismo del mundo.